Comenzar por decir te odio sería grandioso.
Odiarte, aborrecerte, detestarte... sería grandioso.
Eres torturante.
Apareces en la boca de amigos y me destrozas el alma.
Las fechas del calendario traen tu recuerdo a mi mente y nublas mi día.
Quisiera aborrecerte desde lo más sincero y hondo de mi ser.
Juro que sería deseable antes que esta nostalgia que me inunda la vida.
Tengo que olvidarte, anularte en mi ser, desentrañarte.
Pero te extraño, y duele no creo que sepas cómo.
Días como estos son como tenerte clavado en el cuerpo.
Puedo vivir, puedo respirar, pero duele a todo momento.
Entristeces mis días.
Realmente siempre creo olvidarte, y lo hago en verdad, pero vuelves...
Siempre vuelves, y te odio por eso.
Un año ya y vuelves como si nada a mi mente, a mi recuerdo y me destrozas por dentro.
No logro entender qué parte de mi te extraña con esa urgencia desgarradora.
Pareciera que todavía no logro dejarte ir, y lo odio.
13/10/2014
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